Desde México
10/Octubre/2013
Cárdenas, Peña y la Renta Petrolera
Rodrigo Huerta Pegueros*
In
Memoria a Luis Diaz Diaz, un Amigo Entrañable
Cuando el presidente Enrique
Peña Nieto presentó a la nación su iniciativa energética donde se propone
reformar los artículos 27 y 28 co9nstitucionales, tomo como bandera la figura
del general Lázaro Cárdenas del Río, quien hace 75 años expropio la industria
petrolera.
Sin embargo, la utilización
del recurso discursivo del general Cárdenas donde expuso los motivos que lo
impulsaron a tomar la decisión
expropiatoria, dejó plenamente asentado que los recursos provenientes del
petróleo serían exclusivamente para beneficio de los mexicanos y por lo tanto,
sería el gobierno federal el garante de su exploración, extracción y
comercialización. Dejó asentado que la iniciativa privada nacional solo podría
suscribir contratos para prestación de servicios y nada más.
Esta filosofía patriótica y
nacionalista del gobierno cardenista fue norma respetada por los gobiernos que
le precedieron a la vez que fue enriquecida con candados constitucionales para
evitar que tanto empresarios nacionales como extranjeros se convirtieran en
beneficiarios de la llamada renta petrolera.
No olvidemos que a pesar de
todo lo que se diga la renta petrolera ha servido al paso de las décadas para
detonar el desarrollo nacional, fortalecer la economía y promover el bienestar
de las clases menesterosas del país.
Gobernantes de diferentes
grupos sociales y filosóficos provenientes del PRI—incluido el presidente
Salinas de Gortari—se opusieron determinantemente a aprobar cualquier
modificación constitucional que allanara el camino para la participación de la
iniciativa privada extranjera en el sector energético, petróleo, gas y
electricidad—por lo que ahora sorprende a propios y extraños la forma como el
presidente Peña Nieto trata de nulificar lo que por décadas los mexicanos hemos
conservado como patrimonio nacional.
Para nadie fue una novedad
que el Partido de Acción Nacional haya presentado ante el Congreso de la Unión
su iniciativa privatizadora en donde abre de par en par las puertas para la
participación de extranjeros en áreas de exploración y explotación del recurso
petrolero.
La diferencia con la del PRI
es que la única novedad sea que en lugar de otorgar el gobierno federal a los
extranjeros contratos por producción lo haga vía contrato por utilidad
compartida, lo cual no deja de ser una forma de entrega de parte sustancial de
la renta petrolera que bien podría ahorrarse la nación si se pone en práctica
la reforma propuesta por Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano a través del Partido de
la Revolución Democrática.
La verdad sea dicha.
El discurso del Presidente
Peña Nieto ha resultado fallido, como fallido ha sido la forma de confundir a
los mexicanos con la puesta en escena de la figura del general Cárdenas a quien
se pretende vender hoy como un gobernante privatizador, cuando su postura fue
clara en cuanto a reservar los hidrocarburos para beneficio de México.
Este lunes, el presidente de
la República enviará desde Los Pinos su mensaje con motivo de su primer año de
labores. En esta ocasión, seguramente hablará sobre los puntos más
sobresalientes de su gestión gubernamental y las diferencias que ha logrado
identificar con su antecesor Felipe Calderón Hinojosa, pero siendo también un
momento propio para insistir en su propuesta legislativa para reformar la
constitución y ofertar a empresarios y extranjeros su participación en la
exploración y explotación del petróleo, utilizando como argumento principal el
que los mexicanos no contamos con tecnología de punta que nos facilite la
extracción del petróleo que hoy se encuentra en aguas profundas.
Sin embargo, el ingeniero
Cárdenas ha insistido de que no es necesario reformar la constitución para
lograr los objetivos planteados y de que los mexicanos bien podríamos sacar de
aguas profundas el recurso sin otorgar parte de la renta petrolera a la
iniciativa privada.
Las tres propuestas
presentadas por el PAN, PRI y PRD están ahora en la cancha de los legisladores
y particularmente en la cámara de senadores, donde se debatirá a fondo y se
votará en consecuencia.
Veremos ahora de que están hechos
los legisladores y si puede más su interés particular o partidista que el
interés nacional. Por lo tanto, todos debemos estar atentos para proceder en
consecuencia y de alguna forma hacerles ver a los representantes populares que
de no actuar con visión de altura estaremos entregando parte de nuestro
patrimonio a los nunca saciables señores del dinero nación al y trasnacional.
Periodista/Analista
Político*
porteno4964@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario