Cortesía De Red Electrónica
Desde Colombia
Fecha: 11 / Diciembre /2015
Comandante Pablo Beltrán COCE ELN
FGI Milton
Hernández ELN de Colombia
Bolívar, el Caraqueño Americano, se
hallaba refugiado en Jamaica; a donde había llegado huyendo de Cartagena.
En su repliegue, el Libertador tenía la
certeza, que aunque se impusiera el régimen de terror del imperio español, los
patriotas americanos persistirían en su lucha de independencia y triunfarían,
como al fin sucedió.
Tal predicción la hizo el 6 de septiembre
de 1815, en su Carta de Jamaica, la que vista hoy representa un conjunto de
visiones, en las que el joven Bolívar anticipó el camino de autodeterminación,
que seguirían los pueblos emancipados del yugo español. Sus profecías hablan de
las potencias europeas, los ricos americanos, la Nueva Granada y de los
sistemas políticos.
Donde nace la anti democracia
Para el Libertador los sistemas de
gobierno contrarios a la mayoría de la sociedad, son anti democráticos, porque:
“Un pueblo es esclavo, cuando el gobierno
por su esencia o por sus vicios, holla y usurpa los derechos del ciudadano”.
Y al analizar la interdependencia que
existe entre las grandes riquezas y mantener la esclavitud, como en el caso del
Perú, afirmó que:
“Los ricos no toleraran la democracia”.
En su crítica al saqueo del imperio
español, llama al resto de Europa a promover la independencia de los países:
“No sólo porque el equilibrio del mundo así lo exige, sino porque éste es el
medio legítimo y seguro de adquirirse establecimientos ultramarinos de
comercio”.
Convocatoria sana, que terminó siendo
vana, dado el rumbo imperialista en que se precipitó Europa, a lo largo del
siglo 19.
'Somos los legítimos propietarios del
país'
Llamó Bolívar al pueblo mestizo americano
a luchar por sus derechos, en contraposición de los usurpadores españoles:
“Siendo nosotros americanos por
nacimiento, y nuestros derechos los de Europa, tenemos que disputar a estos los
del país, y mantenernos en él contra la invasión de los invasores”.
Lucha de liberación está destinada a
triunfar, al hacerse con entrega total:
“América combate con despecho y rara vez,
la desesperación no ha arrastrado tras sí la victoria”.
Venturas
Y Desventuras De Los Colombianos
La privilegiada posición geopolítica, que
tiene el actual territorio colombiano, llamado en la colonia, como la Nueva
Granada, hizo decir al Libertador, que:
“La Nueva Granada es el corazón de la
América”.
En sus sueños, Bolívar expresó, que la:
"Nueva Granada se unirá con
Venezuela... Esta nación se llamaría Colombia como tributo de justicia y
gratitud al creador de nuestro hemisferio... cuya capital se funde entre los
confines de ambos países, en el soberbio puerto de Bahía Honda. Esta posición
aunque desconocida, es más ventajosa por todos respectos".
Buen conocedor de nuestras costumbres, el
Libertador criticó a los colombianos el excesivo provincianismo, que resulta en
dispersión del gobierno y debilitamiento del Estado, rasgos que él llamó,
“adicción extrema a la federación”.
Hoy, Colombia es mantenida como pieza
clave de los planes imperialistas; mientras Bahía Honda está cubierta con las
nubes de polvo de carbón, provenientes de los puertos vecinos, por donde las
multinacionales se llevan esta riqueza de La Guajira.
En cuanto a la debilidad del Estado
central, ésta se mantiene, pese al régimen presidencialista dominante, incapaz
de interpretar a las regiones colombianas.
La
Patria Grande Americana
Luego de independizarse, acertó el
Libertador, al decir que se construirían más repúblicas, que monarquías en el
territorio americano; pero dudó del éxito del emprendimiento y 200 años
después, la vida le concede la razón, al mantener vigente su interrogación:
“¿Seremos nosotros capaces de mantener en
su verdadero equilibrio la difícil carga de una República?”Además, con
optimismo trazó el camino de unidad continental, que hoy recorren la ALBA,
Celac y Unasur:
“Yo deseo más que otro alguno ver formar
en América la más grande nación del mundo, menos por su extensión y riquezas,
que por su libertad y gloria”.
Las jóvenes repúblicas que nacieron tras
la independencia de España, contaban según Bolívar, con las riquezas y
tradiciones comunitarias propias de los pueblos americanos originarios:
“Nosotros somos un pequeño género humano;
poseemos un mundo aparte, cercado por dilatados mares; nuevos en casi todas las
artes y ciencias, aunque en cierto modo viejos en los usos de la sociedad
civil”.
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